Si buscas un barco exquisito en artesanía, exclusivo en su acabado y referente en elegancia, no hay opción para evitar pensar en Riva. La historia empieza en 1842 cuando el joven Pietro Riva recibe el encargo de reparar los desperfectos que una tormenta ocasionó a los barcos de pescadores en el lago Como, Italia del norte. Debido al éxito cosechado en los trabajos realizados decidió abrir un astillero en Sárnico donde empezó a construir los primeros barcos de recreo al estilo Lago de Como.
En 1907, un suceso empaña la historia familiar. Ernesto, hijo mayor de Pietro, queda al frente de la compañía designado por el propio padre, pero al poco tiempo fallece por un desafortunado accidente, dejando a su hermano Serafino como cabeza de la empresa. Éste era un joven con ideas innovadoras y creativas, y su afán por competir, le llevó a ser la persona que a través de su intuición colocó motores de combustión interna a sus barcos. Uno de los lugares donde fundamentalmente desarrolló su actividad fue el propio lago. Entre las dos grandes guerras, Cantieri Riva, logró una gran reputación en distintas competiciones, rompiendo récords en ámbito nacional e internacional. Y de ese modo orientaron la línea de negocio de Riva del transporte al mundo náutico, como proveedor de "lanchas de motor elegantes y lujosas con calidades excelentes de navegabilidad".
Los años 50 fueron un antes y un después para Riva. Empezó a despuntar frente a sus competidores y términos como elegancia intemporal, glamour, y concepto de exclusividad ya tenían nombre y posición dentro del mercado internacional; amén de su calidad, ya que alcanzaban y lo siguen haciendo en el presente la excelencia. Participan en sus productos los mejores materiales y calidades, haciendo un barco, de esta firma italiana, algo distinguido y legendario.
SBT & Co.
